Mientras estaba en una reunión con un miembro de la junta directiva de otra fundación de Bogotá, fui abordado por la inspiración que me llevó a escribir mi propio manifiesto:
Calentamiento global. Hambruna. Enfermedad. En el enfrentamiento con estas incontables crisis que atraviesa nuestro mundo, creemos que el arte provee una afirmación profunda y permanente de esperanza. Inherente al arte está el cuestionamiento constante del estatus quo, de qué es lo establecido, qué necesita ser cuestionado. Esto le permite a los individuos ver más profundamente y dentro del mundo que los rodea. Incrementa el tiempo para contemplar, para observar de una forma más aguda la relación de todo con todo. Nosotros exploramos las historias y los mitos que permanecen en nuestra memoria colectiva, que nos guían en un retorno a nuestras luchas, como personas y como individuos.
Los colombianos y colombianas han sufrido por más de cincuenta años innumerables actos de violencia y guerras civiles. Colombia alberga una de las mayores poblaciones de desplazados en el planeta. Su historia es una de las mas profundas y hermosas. Es el hogar de incontables culturas y una espectacular belleza natural; sin embargo posee un legado de violencia y explotación. Es aquí que plantamos una semilla de cultura, con el sueño de convertirnos en una luz y un recurso de esperanza, para celebrar su belleza innata y el goce de la humanidad en las artes.
Hecha un vistazo a nuestra declaración de misión y valores, y nuestra visión..